Tres Semanas con Linux Mint 18 lo bueno, lo malo y lo feo

La versión Beta de Linux Mint 18 salió el 9 de Junio de 2016, después de descargarlo, hacer respaldo de mi laptop principal tengo casi tres semanas de usarlo en Producción, es decir en la vida real, con el trabajo del día a día y te comento lo bueno, lo mano y lo feo de Linux Mint 18 hasta ahora.

Tres Semanas con Linux Mint 18 lo bueno, lo malo y lo feo

Si me conoces sabrás que soy Administrador de Sistemas Linux, trabajo todos los días con servidores Linux de todos sabores y en todos lados, desde servidores físicos, en la nube, virtualizados, etc. y mi trabajo depende de tener un buen equipo en el que pueda confiar, que tenga todo lo necesario para acceder a los servidores que administro, esté donde esté y sin importar qué, pueda acceder a los servidores para mantenerlos siempre funcionando. Por esto, mi laptop principal es muy importante y rara vez la actualizo por que necesito un sistema estable y 100% confiable. (razón por la que nunca uso windows ja ja ja)

Sin embargo, en esta ocasión me arriesgué a hacer lo que nunca hago, respaldar mi laptop principal e instalar una versión beta de una distro Linux… me pregunto yo mismo: ¿Andaba borracho, bien arriba o algo así? no, definitivamente no, pero decidí arriesgué con Linux Mint 18 beta y te voy a contar como he ha ido en estas tres semanas.

Linux Mint 18 probando probando

Algo que siempre me ha encantado de Linux Mint es que simplemente funciona, es un escritorio tradicional, pero tiene todo lo que un escritorio moderno debe dar al usuario y Linux Mint 18 cumple muy bien.

He trabajado con algunos dispositivos USB, eSata, unidades montadas por NFS y he podido trabajar sin problema, algo que incluso en Ubuntu tuve uno que otro contratiempo.

Al momento de usar Linux Mint 18 beta por primera vez me di cuenta de algo: «No parece una versión Beta», simplemente es una versión que usa una base sumamente estable gracias a que se basa en Ubuntu 16.04 que funciona de forma magistral, y Linux Mint 18 tiene esa misma herencia, trabaja super bien. Ahora que ya está disponible la versión Final puedo decir que no me equivoqué en instalarla.

Una de las cosas que me agradó es el nuevo comando «apt» para gestionar los paquetes desde la terminal, tal vez solo sea mi percepción pero siento que se instalan las cosas más rápido y al menos tienen un indicador de avance para saber cuanto falta para tener instalado el software que quieres.

Lo Bueno

Algo que me exasperaba en Linux Mint 17.x era cuando por algún descuido la laptop se ponía en Hibernación, al momento de apagar el equipo tardaba, pero cuando arrancaba de nuevo tardaba siglos, por 20 minutos o más tenía un ladrillo en el escritorio, y no podía hacer nada. Esto ha mejorado mucho en Linux Mint 18, ahora la hibernación es lo que debería ser aunque tal vez pueda mejorarse un poco.

Linux Mint 18 ha recibido un gran atención al tema del escritorio, con un conjunto de iconos nuevos, nuevos fondos de pantalla y en general una apariencia elegante, moderna y bastante atractiva. En lo personal me ha encantado el tema Mint-Y Dark que es el que he puesto por default en mi sistema y se ve genial.

Por lo general un tema obscuro es complicado de lograr por que hace falta configurar muy bien las zonas en donde los textos tiene que tener letras claras en un fondo obscuro y que en todo momento las diferentes zonas de la aplicación, los botones, los textos e íconos puedan ser legibles. En este sentido el tema Mint-Y Dark ha sido bastante pulido y logra que todo encaje bastante bien, tanto en el aspecto visual como en el funcional.

A este momento con casi cuatro semanas de uso, puedo comentar que Linux Mint 18 es un sistema bastante estable, con muchas mejoras de rendimiento. Algunas de las aplicaciones nuevas (las X-Apps) presentan algún detalle mínimo, pero en general todo funciona y funciona bien.

Durante la instalación no tuve problemas, aunque durante los primeros 2 días con la versión Beta tuve un par de fallos pero estos han desaparecido después de algunas actualizaciones y hasta ahora no se han presentado ningún contratiempo. Toda las aplicaciones que uso funcionan bastante bien.

Una gran sorpresa es que Spotify for Linux ahora se integra perfecto a la applet de sonido, y la aplicación se muestra correctamente en la barra de aplicaciones. Algo que en las versiones anteriores de Linux Mint no ocurría.

Otra cosa que me ha gustado es el cambio en el gestor de actualizaciones, ahora es más informativo sobre que instalas, si afecta a tu sistema o si implica un riesgo de seguridad y deja al usuario decidir que hacer. Esto es algo importante pues empodera al usuario, le hace que se informe y tome una decisión sobre tener un sistema estable, uno mas seguro o que encuentre un balance de acuerdo a sus necesidades.

Lo Malo

Algo que no me agrada de esta versión es que prometieron un cambio en el diseño, pero en la instalación por default no se aprecia esa nueva imagen de la que tanto se habló, si bien el fondo del escritorio ahora es mucho mas agradable, el diseño para las aplicaciones y los iconos son idénticos al anterior y no hay algún tipo de gestor que permita seleccionar un tema del diseño como tal, esto hace mella en lo bien que ha trabajado el equipo de Linux Mint, es definitivo que falta una interfaz amigable en este sentido que muestre como seleccionar el tema «Mint-X», el «Mint-Y Darker» o el «Mint-Y Dark» con un par de clicks.

Algo que siempre ha marcado la diferencia en Linux Mint es «todo listo» desde la instalación, y ahora se han dejado de lado los codecs y los reproductores como vlc, ahora es necesario instalarlos manualmente.

Sin duda lo malo de esta versión es que no haya salido antes. La versión final en verdad que vale la pena, y si la versión beta podía superar por mucho a versiones finales de otras distros, la versión final es Extraordinairamente Buena.

Lo Feo

Aunque es los desarrolladores de Linux Mint dejan claro que el tema está aun en desarrollo, creo que es algo imperdonable que falten algunos iconos tan básicos en el conjunto de iconos Mint-Y como el logout y el quit. También hay algunos aspectos del tema no están completamente pulidos.

El nuevo set de iconos es bueno, se destaca, pero creo que no cumple con algo que la distro siempre ha mencionado en su discurso «Simplicidad y Elegancia» si bien los iconos Mint-Y son agradables, son carentes de elegancia. Algunos son burdos y fallan en transmitir el mensaje gráfico para identificar una aplicación o una función. Por mencionar un par iconos que pueden mejorar en este sentido es el de configuración o Settings que tiene un par de botones tipo on/off mas de iOS pero que no trasmiten nada parecido al par anterior de engranes de Mint-X. Otro es el icono del editor de texto, que es un cuadro de color entre azul y morado con una cuantas lineas blancas… simplemente un FAIL.

Ojalá se corrija en alguna actualización posterior por que parece ser que estos dos iconos fueron olvidados y da un aspecto bastante desagradable, como si algo estuviera roto.

Una cosa que parece que no tiene lugar es el tema «Mint-Y Darker» en donde se cambia el aspecto de algunas áreas de las ventanas como las barras de herramientas y las barras de menú de las aplicaciones y se pone una franja obscura que no termina de encajar en ninguna de las combinaciones que puedas hacer.

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Conclusiones

Después de 3 semanas de uso, Linux Mint 18 es la distro por default de mi laptop principal, también del escritorio de mi oficina y pronto de las PCs de la casa. Durante este tiempo, puedo decir que trabajar con Linux Mint 18 es una experiencia renovadora, refrescante y bastante satisfactoria con grandes novedades (a veces por pequeños detalles como al usar la calculadora) que en conjunto un escritorio bastante interesante y atractivo para usar. Algo que otras distros han perdido o no logran aportar a sus usuarios.

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